Alejandro Blanco (COE): ‘Los Juegos Europeos son un momento histórico para el crecimiento del pádel’

«Creo que es un momento histórico para el crecimiento que está teniendo el pádel«. La conversación con el número uno del deporte ibérico, el presidente del Comité Olímpico Español Alejandro Blanco Bravo, comienza a pie de pista, en el Ksos de Cracovia, mientras en las pistas los miles de colores de las camisetas de las selecciones nacionales de los 24 países competidores se mezclan en un auténtico fresco.

Blanco continúa su reflexión: «El pádel es el deporte que más ha crecido en los últimos años en cuanto a practicantes y espectadores, y estar aquí en los Juegos Europeos es sin duda un gran éxito». Si los EG2023 suponen un punto de inflexión en la relación con los pesos y medidas del tablero deportivo mundial, la disciplina Mixta demuestra cómo el pádel es un deporte que sabe mirar al futuro sin perder de vista la dinámica del aficionado y del tejido social, teniendo en cuenta que el mixto es un gran clásico de este deporte. Un aspecto que rima con la ambición de los cinco círculos, los Juegos Olímpicos.  «Haber introducido el mixto en estos Juegos Europeos es un verdadero paso adelante para las exigencias del movimiento olímpico. El pádel vive un momento excepcional, es cierto, pero yo digo que el mejor momento para este deporte está por llegar, porque estamos ante un crecimiento que no muestra límites«.

Por ello, Alejandro Blanco reconoce la labor de estos últimos años: «Quiero decirle a mi amigo Luigi Carraro que gracias a su trabajo y al de la Federación Internacional, el pádel ha crecido mucho y el futuro de este deporte no hay que leerlo en metas a corto o medio plazo, porque hay que proyectarlo en profundidad. Lo vemos todos los días porque a la gente de todo el mundo le gusta el espectáculo del pádel y al mismo tiempo le encanta jugar al pádel«.

Los EG2023 hacen hincapié en un aspecto en el que la Federación Internacional de Pádel lleva tiempo trabajando de forma continuada, como son las competiciones por equipos, una vía especialmente interesante de cara al futuro: «Sin duda«, es el pensamiento del Presidente Blanco, «porque en todos los deportes, el sentimiento hacia la bandera o la camiseta del propio país es muy fuerte y lleno de emoción. Llevar la camiseta de la selección es un logro para cualquier deportista. Los españoles, por cierto, como los italianos y muchos otros en el mundo, somos especialmente apasionados desde este punto de vista, y no me refiero sólo a los deportistas o a los entrenadores y personal, sino también a la gente que ama el deporte«.

También con el número uno del deporte español, una reflexión sobre el sueño de convertirse en deporte olímpico: «Creo que lo importante no es llegar rápido a una determinada meta, sino cómo y por qué camino se llega. Hablo desde la experiencia que hemos vivido y vivimos en España, donde el pádel está dando un paso adelante cada día. Y así vemos un crecimiento del movimiento gobal, en cuanto al número de maestros, jugadores, practicantes y aficionados. Por eso, no debemos pensar en la meta a alcanzar sino en cómo lo haremos paso a paso y este aspecto será fundamental para aspirar a participar en los Juegos Olímpicos, siempre teniendo en cuenta cómo el pádel es el deporte que más ha crecido en los últimos años”.

España es la estrella polar del movimiento mundial, medida de comparación para otros países junto con Argentina, y la pregunta «¿Cuándo podremos llegar al nivel de los españoles?» es una de las más frecuentes en las entrevistas. Blanco sonríe: «Para nosotros es un orgullo ser un referente en este deporte, pero me gustaría subrayar cómo el aspecto del crecimiento es inherente al significado estricto de cada disciplina y la consecuencia directa de este aspecto es la brecha cambiante entre atletas, equipos, países.  Nos encontramos con constantes mutaciones en los pesos y brechas entre países porque todos crecen, mejoran, progresan y en cualquier caso cambian y esto también ocurre en España donde debemos seguir creciendo de lo contrario ¡los demás nos alcanzarán!»

Blanco rompe en una amplia sonrisa y, como deportista que es, antepone su ser deportivo a todo: «Es cierto que no sería bueno para nosotros que nos alcanzaran otros países, pero sí para el movimiento mundial del pádel. Por otro lado, el nivel técnico está cambiando todo el tiempo, porque los atletas, entrenadores, deportistas o simples aficionados están explorando nuevos métodos de entrenamiento, utilizando el vídeo, el estudio analítico, las grabaciones, los datos, la inteligencia artificial. Como ya le he dicho al presidente de la Fip, Luigi Carraro, y al presidente de nuestra federación, Ramón Morcillo, en pádel, el nivel está creciendo mucho y muy rápido«.

Las finales y semifinales se jugarán en la preciosa Plaza del Mercado de Cracovia, una de las más bellas y con más historia del mundo, será un lugar extraordinario para el pádel. «Aún no la he visto, pero Luigi (Carraro ed.) me ha dicho que será un espectáculo, conozco bien la plaza, es preciosa«, explica Blanco, «y nunca hay que olvidar que el deporte no son sólo los deportistas, que de todas formas son una parte fundamental, sino que todo lo que lo rodea contribuye a crear un ambiente extraordinario. Cuanto más bonito es el lugar que acoge el evento, más atractivo resulta para el público» Un camino que el pádel está siguiendo decididamente: «Creo que el movimiento del pádel está trabajando en esta dirección y lo está haciendo muy bien. Me siento un gran embajador del pádel porque creo en este deporte y llevarlo a una plaza como Cracovia no sólo garantizará una gran visibilidad, sino que también mejorará el espectáculo en directo, así como el espectáculo televisivo«.