De Argentina y España a la fama mundial: el fenómeno del pádel que conquistó el mundo
octubre 10, 2024Una historia de ascenso irresistible, que comenzó en silencio a finales de los años 60 en México. Nacido casi por casualidad en la villa del millonario Enrique Corcuera, el pádel comenzó su aventura a pequeños pasos, antes de despegar definitivamente en los años 80. En este caso, fue Argentina, donde la popularidad creció exponencialmente, y España, donde el apoyo de las instituciones deportivas fue inmediato, quienes llevaron al pádel a la fama. Uno de los factores clave que juegan a favor del pádel es su capacidad para involucrar a personas de todas las edades y orígenes — incluidos niños, ancianos y personas con discapacidades — una de las características que aún hoy son su fortaleza.
En Argentina y España pronto surgió un ambiente social positivo, donde el pádel promovía un estilo de vida saludable y activo. Entre finales de los 80 y principios de los 90, el deporte comenzó a expandirse a otras naciones, con las primeras pistas apareciendo en Brasil, Uruguay, Chile, Francia, Estados Unidos, Canadá y Italia. Miles de personas se apasionaron por este deporte, que en Argentina se vivía con gran entusiasmo y en España se asociaba con prestigio y exclusividad.
Con el rápido crecimiento del pádel en Argentina llegaron las primeras oportunidades de negocio y los primeros grandes torneos. Según el FIP Research & Data Analysis Department, la marca Sport Connection, en colaboración con Tonio y Cacho Nicastro, organizó el primer torneo internacional de la historia, hecho posible por sus contactos en España. El primer enfrentamiento entre España y Argentina se celebró en enero de 1988 en Mar del Plata, provincia de Buenos Aires.
Según los registros de la época, la delegación española, dirigida por el capitán y dirigente Don Rafael Silvela, estaba compuesta por los 16 mejores jugadores españoles, incluidos Juan Fontán, Javier Arenzana, Santiago Arpón, José Segismón, Miguel Goizueta, Arturo y Carlos Jiménez, Fernando y Javier Sartorius, Manolo Lezon, Antonio Cavero, Pedro Vernis, Joaquín Not (“Chechu”) y Julio Alegría. En el equipo femenino estaban María, Ana y Sofía Silvela, junto con María Wakonigg.
Algunos de los jugadores argentinos incluían a Ricardo Cano, Alberto Pizzolo, Willy Barrera, José Luis Abuchdid, Manuel Caracotche, Javier Maquirriain, Pequeño Quintín, Guillermo Caporaletti y Severino Iezzi para el equipo masculino, y Adriana Costagliola, Virginia Mazzuchi, Daniela Álvarez, Liliana Patrón y Cecilia Baccigalupo para el equipo femenino. Baccigalupo más tarde ganaría tres títulos mundiales, primero con Mazzuchi en 1992, y luego con Costagliola en 1994 y 1996.
En agosto de 1988, el primer equipo argentino viajó a España, visitando Bilbao, Madrid y Marbella. Pronto quedó claro que España y Argentina desempeñarían un papel central en la escena internacional del pádel. Durante esos años, se estableció una relación bilateral entre los dos países, lo que permitió desarrollar el pádel más allá de sus fronteras; entre las innovaciones, se decidió organizar un enfrentamiento anual entre España y Argentina, que continuó durante tres años.
También en 1988, un grupo de amigos liderados por Oscar «Cacho» Nicastro fundó la Asociación Argentina de Pádel (APA), con Alberto Villaverde como primer presidente. El objetivo era representar oficialmente el deporte, definir sus principios filosóficos y técnicos y las reglas, además de planificar y gestionar el desarrollo del pádel en Argentina.
En España, la Asociación Española de Pádel se fundó en 1991 y se registró oficialmente con el acrónimo P.A.D.E.L., que significa “promoción de actividades deportivas, educativas y lúdicas”. En 1991, tras varias reuniones entre españoles y argentinos y con el nacimiento de las primeras federaciones nacionales, surgió la idea de crear una Federación Internacional. Así, el 12 de julio de 1991, las federaciones de Argentina, Uruguay y España se reunieron en Madrid en el Club de Golf La Moraleja, creando la Federación Internacional de Pádel. El primer presidente electo fue Julio Alegría Artiach, originario de Bilbao. Durante esa reunión, se establecieron las reglas para el primer World Championship, previsto para celebrarse en Madrid en 1992, con las finales en la Expo 92 de Sevilla. Pero esa es otra gran historia…